Queridos hombres,
Hoy en su día quería decirles esto…
Gracias por existir.
Gracias por ser parte de este maravilloso mundo.
Gracias por todo lo que me han hecho aprender de cada uno de
ustedes.
Que hoy sea su día, es de las cosas más bonitas para que
exista un equilibrio entre los hombres y mujeres, y creo que esa es la igualdad
que estábamos buscando nosotras.
Esa igualdad que nos hace conectarnos y estar en la misma
sintonía, no de aquel feminismo radical que confundió su ruta, su camino y su
destino; para alejarnos un poco más y más.
Darles el lugar que merecen, como los número uno de cada
familia, por aquellos que han luchado y perseverado y durante Siglos han traído
el pan a casa, por aquellos hombres valientes que fueron a la guerra, unos
morían por su patria y unos pocos regresaban a casa. Por aquellos hombres fuertes
que salvaban a sus damas en aprietos, las cuidaban y las protegían.
Aquellos héroes que nos compartieron su escritura, su
conocimiento, su ciencia y filosofía. Aquellos hombres que nos comparten día a
día una sonrisa, una carcajada, otras formas de ver la vida, su simpleza, su
dirección y su poca complicación.
Aquellos hombres perseverantes, con una meta por delante,
con la bandera de su Dios en alto y el tatuaje de las cosas más valiosas para
cada uno de ustedes.
Aquellos hombres padres, hermanos, primos, tíos, amigos,
compañeros, profesores, colegas o simplemente alguien que en un momento, nos enseñó
una lección.
Hombres: Realmente les deseo lo mejor y lo mejor es lo que
les dice su corazón, no hay más.
Y, comprendo porque tal vez nosotras las mujeres somos más
festejadas, por aquellas madres que lo dieron todo, que nos cargaron en la cuna
de su vientre, que sufrieron los dolores del parto, aquellas protectoras, sin
darnos cuenta de lo extremadamente valioso y asombroso que es el cuerpo humano,
sí, el nuestro es espléndido, ¿pero el de ustedes? De igual manera son nuestros
creadores, imaginar de las perfecciones microscópicas que nos hacen existir,
que de solo un esperma, nacimos cada uno de nosotros. Si nos ponemos a pensar,
tal vez nadie lo valore, pues ya somos 7 mil millones de personas
aproximadamente en el mundo, pero si lo analizamos desde el microcosmos; eso es
a lo que llamo un MILAGRO.
Hombres, muéstrenos su vulnerabilidad, lo siento de parte de
todas las mujeres cuando les callamos su llanto, créanme los sentimientos no
solo son de mujeres, ni de la feminidad, ni la homosexualidad. El corazón
pertenece a todos, Sí, son los fuertes, al menos yo siempre los trataré como
tal, pero simplemente ya no se hagan tan fuertes.
Y gracias, por toda la paciencia cuando no comprenden
nuestro mundo, ni nuestra complicación, ni nuestros dramas, ni cuando podemos
ponernos locas tan solo con unos pares de zapatos. Sé muy bien que jamás comprenderán
que es maquillarse cada día, depilarse de 8 a 20 días dependiendo del caso, ni
el ciclo de cada mes, ni que es haber jugado con muñecas cuando éramos pequeñas,
ni qué es tener un niño en el vientre (OJO, YO AÚN TAMPOCO). Así como nosotras
tampoco comprenderemos que es salir desde los 8 años a jugar con los amigos
fútbol, videojuegos de toda índole, ir al súper y solo comprar jamón simplemente
porque solo iban por el jamón, vestirse y estar listos en 5 minutos, ni de cómo
hablan entre ustedes a cerca de nosotras.
Y lo siento, por todas aquellas mujeres que se enojaron con
ustedes simplemente porque se les olvidó el pan, por desesperarnos por
pequeñeces, por humillaciones inconscientes por miedo a enamorarnos, por querer
que siempre sean los primeros en dar el paso, por la falta de agradecimiento
por cada detalle que nos comparten, por hablar con indirectas cuando necesitan
que seamos directas, por tener que hacer demasiado por nosotras y que a veces
no sea reconocido.
¿Y cuándo les daremos su lugar?
Hoy mismo!
De corazón
Karina Ruiz Catalán.
¡Feliz 19 de noviembre de 2013!
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